Que el miedo sea el medio, no el fin

Todos y todas lo hemos sentido y lo hemos vivido en mente y cuerpo. Algunas personas lo sienten más frecuentemente que otras, y sin temor a equivocarme, en al menos una ocasión nos ha frenado en seco justo antes de atrevernos a hacer algo.

 

Señoras y señores, con ustedes…el miedo. Brené Brown lo define como una emoción negativa, de corta duración y de alerta que se da en respuesta a una amenaza percibida.

Esta emoción se origina en la mente, pero también se vuelve una reacción física que se manifiesta en nuestro cuerpo: se incrementa nuestra presión sanguínea y nuestro ritmo cardiaco, nuestra respiración se hace más agitada e incluso se redistribuye la sangre hacia partes del cuerpo que nos permitan prepararnos para pelear o para escapar. Mejor dicho…caemos en un estado completamente primitivo, haciendo a un lado esos humanos súper inteligentes, empoderados y tecnológicos que somos, y que descubren CO2 en lejanos exoplanetas.

 

No es que esté mal sentir miedo. De hecho, ha sido necesario para sobrevivir y permanecer como especie a lo largo de millones de años. El miedo es un lugar donde es inevitable habitar, y que hay que respetar y entender, porque es un gran catalizador para conocernos mejor, fortalecernos y crecer.

 

Si no podemos evitar el miedo, ¿qué podemos hacer al respecto?

Creo que la respuesta a esta y a muchas otras preguntas de este estilo que nos pueden surgir se responden con la misma respuesta: SER CONSCIENTES.

 

¿Cómo así?

 

Me refiero a tener la capacidad de identificar cuando tenemos miedo, para poder entender las razones que detonaron ese miedo, identificar lo que ese miedo nos hace pensar, sentir y hacer, para luego tomar acción al respecto con consciencia. Es fácil de escribir, pero difícil de hacer. Difícil, pero no imposible. Como todo en la vida, se trata de practicar, practicar y practicar, hasta tener la maestría deseada en nuestra gestión del miedo.

 

Éste es uno de esos temas que nos emociona mucho entender y profundizar dentro de Experiencias Ayáka, porque sabemos por cuenta propia los efectos que el miedo tiene en cada uno de nosotros, y lo mucho que podemos potenciarnos si aprendemos a gestionarlo. Es por esto que desarrollamos un proyecto de investigación llamado “Las creencias y temores que nos limitan” una primera exploración para identificar cuáles de los miedos son los más comunes en las personas y cuáles son los que más nos paralizan para materializar nuestras ideas y/o proyectos creativos.

 

Dentro de nuestra investigación encontramos 30 diferentes tipos de temores, que clasificamos en 7 categorías:

  1. Temores de autoestima
  2. Temores sociales y de reconocimiento
  3. Temor a las ideas
  4. Temores hacia el mercado
  5. Temores al fracaso
  6. Temores por falta de tiempo y recursos
  7. Temores relacionados a que no sea el momento adecuado

 

Te invitamos a que seas parte del estudio contribuyendo con tus respuestas en el
siguiente link: https://experienciasayaka.com/estudiotemores/

 

Con tu contribución podremos seguir entendiendo los temores y creando contenido y conocimiento que ayude a las personas a gestionarlos mejor. Como agradecimiento por tu participación, podrás descargar un diccionario de temores para que empieces a aprender de cada uno y tomes acción. Los resultados del estudio los estaremos compartiendo próximamente aquí en nuestro gabinete de curiosidades y con todas las personas que hicieron parte de él.

 

Recuerda: no se trata de no tener miedo, se trata de que el miedo sea el medio y no el fin.

 

 

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